A sus 13 años, Christian Costoya se ha convertido en una de las grandes esperanzas del automovilismo nacional. Natural de Galicia, este joven piloto no solo lidera actualmente el ranking mundial de la FIA en la categoría OK‑Junior, sino que lo hace con una autoridad y regularidad que recuerdan a los grandes nombres de la historia del karting. Su proyección es clara: tiene todos los ingredientes necesarios para dar el salto a las categorías previas a la Fórmula 1.
Un palmarés construido desde la base
El ascenso de Costoya no es fruto de un buen año, sino de una trayectoria cimentada desde las categorías más tempranas del karting internacional. Su palmarés incluye:
- Campeón de la WSK Champions Cup en 60 Mini (2020)
- Campeón de la WSK Super Master Series 60 Mini (2021)
- Subcampeón de Europa en 60 Mini (2021)
- Campeón de la WSK Euro Series (2022)
- Protagonista en múltiples podios europeos en OK-Junior (2024)
- Temporada 2025: líder del ranking FIA OK-Junior, vencedor de manga en el Mundial, segundo puesto y pole position incluida
El gallego ha logrado consolidarse como referencia en cada categoría que ha disputado, destacando no solo por su velocidad, sino por su capacidad de análisis, adaptabilidad y temple en pista.
Viterbo: confirmación del dominio
El pasado fin de semana en Viterbo, Italia, Christian Costoya firmó una de las actuaciones más completas de su carrera deportiva. En el marco de la tercera prueba del Campeonato de Europa FIA de Karting OK-Junior, logró la pole position, venció en las cinco mangas clasificatorias, ganó la super heat y remató el fin de semana con una victoria rotunda en la final.
No solo fue dominante, sino que lo hizo en un trazado técnico, frente a rivales más experimentados y con un control total desde el semáforo hasta la bandera a cuadros. Este pleno absoluto le sitúa con una ventaja de 56 puntos en la clasificación general del Europeo, dejando prácticamente sentenciado el título a falta de una sola prueba por disputarse.
Representación: AllRoad Management, una estructura para llegar lejos
El talento de Costoya está arropado por una estructura profesional de alto nivel. Su carrera está gestionada por AllRoad Management, una agencia especializada en el desarrollo integral de jóvenes pilotos. AllRoad no se limita a gestionar contratos o patrocinios: trabaja a fondo la estrategia deportiva, la proyección mediática, la formación técnica y la preparación psicológica de sus representados.
Gracias a esta estructura, Costoya ha podido centrarse exclusivamente en lo que mejor sabe hacer: pilotar. La agenda deportiva, el entorno técnico y el enfoque hacia los monoplazas están diseñados con precisión para facilitar su transición hacia categorías superiores como la Fórmula 4, etapa prevista para 2026 si se cumple el calendario proyectado por su entorno.
AllRoad cuenta con experiencia en la promoción de talentos que han llegado a categorías FIA internacionales, y su implicación en la carrera de Costoya es un indicio claro de que el proyecto deportivo del gallego está perfectamente alineado con los requisitos para llegar a la antesala de la Fórmula 1.
Un piloto con visión y madurez precoz
Más allá de los resultados, lo que asombra del piloto gallego es su capacidad de leer la carrera. Costoya no se limita a correr rápido: estudia las repeticiones, planifica adelantamientos, evalúa errores y mejora en cada vuelta. Su estilo ha sido comparado con el de Max Verstappen en su etapa de formación: agresivo, firme, y con un talento evidente para gestionar situaciones de carrera con naturalidad.
En Viterbo, por ejemplo, supo administrar la presión de liderar desde la pole, sin cometer errores y respondiendo con solvencia en cada fase del fin de semana. Su rendimiento bajo condiciones cambiantes o en trazados técnicos ha sido una constante durante los últimos años, y eso habla de una preparación mental muy por encima de la media en su categoría.
El futuro inmediato: Fórmula 4 en el horizonte
La hoja de ruta para Christian Costoya es clara. Si todo sigue como hasta ahora, el salto a la Fórmula 4 está previsto para la temporada 2026, con la vista puesta en equipos de prestigio dentro de los certámenes más competitivos de Europa. Este paso será clave para confirmar su talento al volante de un monoplaza, pero tanto su entorno como los observadores del paddock coinciden: tiene el nivel, la actitud y el respaldo para triunfar.
En paralelo, su nombre ya comienza a sonar en las academias de pilotos vinculadas a escuderías de Fórmula 1. Su rendimiento en karting, unido a la proyección mediática y el respaldo de una agencia como AllRoad, lo convierten en un candidato ideal para formar parte de programas de formación como los de Red Bull, Alpine o Sauber, entre otros.
Conclusión: una realidad del automovilismo español
Christian Costoya no es simplemente una promesa. Es una realidad contrastada del karting internacional. Su trayectoria está repleta de éxitos, su entorno está perfectamente preparado para escalar en la pirámide del automovilismo y su pilotaje refleja la madurez de quien entiende que el talento necesita estructura, método y constancia.
España vuelve a tener un nombre en boca de todos en los circuitos internacionales. El niño de oro del karting español ya ha empezado a escribir su historia. Y todo apunta a que esta historia no ha hecho más que comenzar.